Autor: Alfredo Doncel

milano real

MILANO Y ALCAUDÓN REAL

Este sábado he dado un corto paseo por el campo y dos aves con el apellido de real se han puesto a tiro de cámara: el milano real (Milvus milvus) y el alcaudón real meridional (Lanius meridionalis). El milano no cría en esta zona aunque sí en otras zonas de España, los que se ven por estas fechas son aves invernantes. El alcaudón cría por la zona pero en muy escasa medida, en otoño e invierno son más fáciles de ver porque llegan más individuos.




En esta foto se aprecia perfectamente el patrón de plumaje de los milanos reales,
de tonos rojizos en cola y cuerpo y dos ventanas claras en los extremos de las alas.
La cola es escotada pero la tenía tan extendida que casi no se aprecia

La cola es muy móvil y les proporciona una alta maniobrabilidad

Alcaudón real meridional, con su característico antifaz negro, posado es un oteadero despejado
para la detección de pequeñas presas
Como digo, el paseo fue corto y no vi muchos más pájaros para fotografiar, no obstante me entretuve con alguno de los signos del otoño en que nos encontramos. No son los de un hayedo pero es lo que hay.

Hojas de quejigo (Quercus faginea) pasando del amarillo al ocre

Zumaques (Rhus coraria) con su llamativo color carmín

milano real

MILANO Y ALCAUDÓN REAL

Este sábado he dado un corto paseo por el campo y dos aves con el apellido de real se han puesto a tiro de cámara: el milano real (Milvus milvus) y el alcaudón real meridional (Lanius meridionalis). El milano no cría en esta zona aunque sí en otras zonas de España, los que se ven por estas fechas son aves invernantes. El alcaudón cría por la zona pero en muy escasa medida, en otoño e invierno son más fáciles de ver porque llegan más individuos.




En esta foto se aprecia perfectamente el patrón de plumaje de los milanos reales,
de tonos rojizos en cola y cuerpo y dos ventanas claras en los extremos de las alas.
La cola es escotada pero la tenía tan extendida que casi no se aprecia

La cola es muy móvil y les proporciona una alta maniobrabilidad

Alcaudón real meridional, con su característico antifaz negro, posado es un oteadero despejado
para la detección de pequeñas presas
Como digo, el paseo fue corto y no vi muchos más pájaros para fotografiar, no obstante me entretuve con alguno de los signos del otoño en que nos encontramos. No son los de un hayedo pero es lo que hay.

Hojas de quejigo (Quercus faginea) pasando del amarillo al ocre

Zumaques (Rhus coraria) con su llamativo color carmín

tarabilla comun

GARZA REAL PERDIDA Y CORZO AL ESCONDITE

Parece que no acaba nunca este verano, pero la verdad es que ya se nota la presencia de algunas aves invernantes, y la ausencia de las estivales. Hay por tanto mucho movimiento, y uno puede encontrarse casi cualquier cosa. El domingo, tuve uno de esos encuentros raros, y es que en el lavadero me sorprendió una garza real (Ardea cinerea). Seguramente divagaba por la zona y para pasar la noche buscó algo de agua por si había algún pez o rana para desayunar. Al verme, se levantó, pero igualmente iba a empezar la mañana en ayunas.

Garza real al amanecer
Como siempre, madrugar ayuda a ver mamíferos, y a unos 50 metros un corzo (Capreolus capreolus) avanzaba siguiendo la dirección de una ribera. Él no me vio, y yo sólo pude ver su cabeza y parte de su grupa, pues la hierba alta prácticamente le tapaba. Al final, desapareció en el carrizo.

En el centro de la imagen, una oreja, un ojo y el hocico de un corzo
A pesar de la sequía, del calor y de que aún no ha sido el día del Pilar, ya había cazadores, así que sin mucha esperanza de ver pájaros me centré en algunos artrópodos mientras volvía a casa.

Argiope lobata un tipo de araña lobo de gran tamaño
A contra luz se observa el diseño de su gran tela de araña
Saltamontes de alas rojas (Oedipoda germanica?)
Al fina algún pajarillo se dejó ver...

Tarabilla común (Saxicola torquata) sobre una cardencha
Acabo con una foto de hace una semana, cuando hay poca luz y no te apoyas en nada, es casi imposible que no te salga la foto movida, aunque a veces eso tiene su encanto.


Anochecer en Santorcaz

tarabilla comun

GARZA REAL PERDIDA Y CORZO AL ESCONDITE

Parece que no acaba nunca este verano, pero la verdad es que ya se nota la presencia de algunas aves invernantes, y la ausencia de las estivales. Hay por tanto mucho movimiento, y uno puede encontrarse casi cualquier cosa. El domingo, tuve uno de esos encuentros raros, y es que en el lavadero me sorprendió una garza real (Ardea cinerea). Seguramente divagaba por la zona y para pasar la noche buscó algo de agua por si había algún pez o rana para desayunar. Al verme, se levantó, pero igualmente iba a empezar la mañana en ayunas.

Garza real al amanecer
Como siempre, madrugar ayuda a ver mamíferos, y a unos 50 metros un corzo (Capreolus capreolus) avanzaba siguiendo la dirección de una ribera. Él no me vio, y yo sólo pude ver su cabeza y parte de su grupa, pues la hierba alta prácticamente le tapaba. Al final, desapareció en el carrizo.

En el centro de la imagen, una oreja, un ojo y el hocico de un corzo
A pesar de la sequía, del calor y de que aún no ha sido el día del Pilar, ya había cazadores, así que sin mucha esperanza de ver pájaros me centré en algunos artrópodos mientras volvía a casa.

Argiope lobata un tipo de araña lobo de gran tamaño
A contra luz se observa el diseño de su gran tela de araña
Saltamontes de alas rojas (Oedipoda germanica?)
Al fina algún pajarillo se dejó ver...

Tarabilla común (Saxicola torquata) sobre una cardencha
Acabo con una foto de hace una semana, cuando hay poca luz y no te apoyas en nada, es casi imposible que no te salga la foto movida, aunque a veces eso tiene su encanto.


Anochecer en Santorcaz

tarabilla comun

GARZA REAL PERDIDA Y CORZO AL ESCONDITE

Parece que no acaba nunca este verano, pero la verdad es que ya se nota la presencia de algunas aves invernantes, y la ausencia de las estivales. Hay por tanto mucho movimiento, y uno puede encontrarse casi cualquier cosa. El domingo, tuve uno de esos encuentros raros, y es que en el lavadero me sorprendió una garza real (Ardea cinerea). Seguramente divagaba por la zona y para pasar la noche buscó algo de agua por si había algún pez o rana para desayunar. Al verme, se levantó, pero igualmente iba a empezar la mañana en ayunas.

Garza real al amanecer
Como siempre, madrugar ayuda a ver mamíferos, y a unos 50 metros un corzo (Capreolus capreolus) avanzaba siguiendo la dirección de una ribera. Él no me vio, y yo sólo pude ver su cabeza y parte de su grupa, pues la hierba alta prácticamente le tapaba. Al final, desapareció en el carrizo.

En el centro de la imagen, una oreja, un ojo y el hocico de un corzo
A pesar de la sequía, del calor y de que aún no ha sido el día del Pilar, ya había cazadores, así que sin mucha esperanza de ver pájaros me centré en algunos artrópodos mientras volvía a casa.

Argiope lobata un tipo de araña lobo de gran tamaño
A contra luz se observa el diseño de su gran tela de araña
Saltamontes de alas rojas (Oedipoda germanica?)
Al fina algún pajarillo se dejó ver...

Tarabilla común (Saxicola torquata) sobre una cardencha
Acabo con una foto de hace una semana, cuando hay poca luz y no te apoyas en nada, es casi imposible que no te salga la foto movida, aunque a veces eso tiene su encanto.


Anochecer en Santorcaz

tarabilla comun

TARABILLAS EN ALDEACENTENERA

El pasado fin de semana estuvimos con una parte de la familia en Aldeacentenera (Cáceres), pueblo entre dehesas pero a un paso de la Sierra de las Villuercas. Algún pequeño ratejo salimos por el campo, aunque casi todo lo pasamos disfrutando de una casa rural encantadora en la que sus dueños nos proporcionaron de todo (El Caserón). 

Dehesas de Aldeacentenera 
Río Almonte desde el Puente de El Conde
Apreturas del Almonte
El domingo, reservé una hora para dar un paseo por las afueras del pueblo aunque amaneció fresco, ventoso y húmedo. No obstante, varios pajarillos de la misma especie, la tarabilla común (Saxicola torquata) me entretuvieron, y por eso merecen una entrada en el blog, aunque sea corta.

Siempre desde un posadero bien visible, las tarabillas vigilan al intruso
El mismo individuo se posó en una valla de alambre, con lo que parecía un bicho bola en el pico
Otro macho, decidió posarse sobre una estaca de madera
Este último individuo prefirió posarse en una zarza