La energía solar mola

Publicado en: Pensando el territorio por esegepe. Texto original

Durante el largo periodo de tiempo en el que llevamos escribiendo en esta web, ya hemos hablado algunas veces sobre energías fósiles. Vimos cómo se estaba buscando petróleo y gas en España, en qué consistía y cuáles eran las consecuencias del fracking o tratamos el cierre de la central de Garoña. Energías contaminantes, causantes del cambio climático y finitas. Algún día se van a acabar… y a ver cómo nos movemos.

Sin embargo, hoy vamos a hablar sobre energías renovables y, más concretamente, de la solar, porque es, como mínimo, raro que en un estado con tantas horas de Sol (¿300 días al año en algunas zonas?), no encontremos los tejados llenos de placas que estén suministrando energía barata y limpia a una población con tanto apetito consumidor.

Placas solares

Explicar cómo convierte la energía proveniente del Sol estas placas de sílice en energía eléctrica no es fácil. Céldas fotoeléctricas que captan los fotones produciendo cargas positivas y negativas y generando un campo eléctrico. No, explicarlo no es fácil ni divertido. Sin embargo, sí que son muy interesantes las consecuencias que tienen sobre el medio ambiente.

Si aumentamos la cantidad de energía producida por estas energías renovables, podremos reducir la cantidad obtenida mediante carbón, gas o petróleo, de tal forma que se reducirá la emisión de gases de efecto invernadero, los causantes del cambio climático que ya, parece, nadie niega (ni tan siquiera su origen antropogénico).

Además, hace algo de tiempo, uno de los problemas que existían con las energías renovables y con las placas solares principalmente, era su precio. Hoy en día, sin embargo, se ha reducido bastante su coste, tanto de instalación como de mantenimiento, por lo que una de las premisas más importante de los que atacan constantemente a la fotovoltaica se ha derrumbado.

Finalmente, empresas españolas son punteras en la instalación y el mantenimiento de estas placas solares, por lo que tenemos cerca a quienes nos pueden asesorar y ayudar en la elección y, de paso, generar trabajo y reducir la alta, altísima, tasa de paro que tenemos. Todo en un sector que puede/debe ser uno de los pilares en los que basar la nueva economía del país.

Un pequeño empujón. Un paso adelante de todos (y si pudiera ser sin zancadillas del gobierno) podría ser una gran ayuda al planeta del cual, hay que recordar, dependemos.

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