Embalse del Amadorio (Villajoyosa)

Publicado en: Más allá de la ciudad por Fran Mercader. Texto original

      Hoy en Más allá de la ciudad queremos mostrarte un sitio bastante bonito para pasar la tarde o dar una vuelta. A unos 5 kilómetros de Villajoyosa, nos encontramos con el embalse del Amadorio, el pantano más cercano al mar de toda España. 

       Se empezó a construir en 1947 y está funcionando desde 1957. La presa del Amadorio, de 63 metros de altura y 318 metros de longitud de coronación la encontramos entre la Vila y Orxeta. Este pantano abastece de agua a la Vila y a Benidorm y pertenece a la Cuenca Hidrográfica del Júcar. 


A la izquierda, los silos de cemento.
Al fondo, el Puig Campana.
      A lo largo del año varía su caudal notablemente. Tiene capacidad para 16 hm3, sin embargo, hace unos días y después de un verano muy seco y un otoño que está siendo muy seco y caluroso, se encuentra al 43,75% de su capacidad con 7 hm3. Según los datos que podemos consultar aquí (varían según la época que leas esta entrada, puesto que se actualizan a la fecha actual), está en niveles inferiores a los de años anteriores. (56,22% esta misma semana en 2012 y 48,13% media de los últimos 10 años). 

     Alrededor de la presa podemos observar un par silos de cemento utilizados durante la construcción de la misma (a la izquierda de la imagen) y antiguas estructuras que se utilizaban para el acopio de áridos. Todo ello bien cuidado y restaurado. 

RUTA

         Si cruzamos la presa, podemos realizar una ruta volteando el pantano. Hay muy pocas ocasiones en las que podemos acercarnos al agua. Tendrás que atreverte campo a través cuando veas que estás próximo a la orilla. 

    La flora que podemos encontrar es la típica de clima mediterráneo, como el pino carrasco, las jaras, romero, lentisco, enebro, esparto, y algunas típicas de ramblas como la adelfa o el taray. 

Pequeño islote donde anidan varias especies de aves. Al fondo, Peña de Orxeta.
          Respecto a la fauna, nos encontramos gran variedad de aves (distintas especies de garzas, grandes bandadas de gaviota patiamarilla, cernícalos, águilas...), mamíferos (conejos, ardillas, zorros, jabalíes o la gineta) y diversos reptiles y anfibios. Además nos podemos encontrar numerosas percas y bastante grandecitas.

         La ruta empieza atravesando un túnel por el que cabe un camión encima del otro perfectamente (solo hay que ver las imágenes) y después de él, nos encontraremos una carretera sin tránsito (más delante verás que está cortada, por eso no te encuentras ningún coche) pero termina esta carretera y te incorporas a una con tránsito, aunque bastante escaso. Así hasta llegar al puente de la CV-770, que es la carretera que une Villajoyosa con Orxeta y Sella. En este punto tienes dos opciones: A) darte la vuelta, o B) seguir por el arcén de la carretera hasta la presa. Yo recomiendo que te des la vuelta, porque la segunda opción puede ser un poco peligrosa, ya que esta carretera si que tiene tráfico abundante. 

Algunas imágenes más de este precioso lugar.

Antiguos acopios de áridos 
Detalle de la presa y la balsa que hay justo debajo desde donde se "chupa" el agua para riego.

Orquídea (Ophrys lupercalis) del pasado Marzo.
Garza real europea (Ardea cinerea) 
Una araña muy común (Hembra de Phalangium opilio)  
     
      En primavera se pueden encontrar decenas de renacuajos de sapo en la orilla del pantano
Las percas del pantano 
      Aprovecho para decir que en la actualidad está prohibido la navegación con embarcaciones de motor a explosión. Y que SÍ está permitida la pesca, aunque vete con cuidado no te vaya a pasar lo que a este hombre
 
Aquí observamos la magnitud del túnel que nos encontramos tras la presa. 
Orxeta, desde el pantano. Al fondo, Sierra de Aitana. 
       Gracias a la sequía que tenemos este año, quedan al descubierto varios árboles secos que normalmente están sumergidos y que nos permiten captar estas bellas imágenes desde el borde del pantano...

Al fondo, la Sierra de Aitana recibe los últimos rayos de sol del día. 


        Sin duda, un sitio que merece ser visitado unas cuantas veces. Está bastante cuidado, no como el de Elche... (ejem!). Al lado del aparcamiento, hay una pequeña área recreativa donde poder comer o merendar a la sombra de los pinos. Además, hay bastantes paneles informativos sobre todo lo que he contado aquí y mucho más.

Si queréis tener más información de este sitio, os dejo este críptico que hizo la CAM.

Edición y fotos: Fran Mercader Román 

Puedes leer y comentar el artículo completo en Más allá de la ciudad