Calendario Maya
Imagen de Francesco Muratori

Creo que todos hemos oído hablar de las predicciones mayas del final del 13º baktún, para algunos estas profecías vaticinaban el fin del mundo hoy 21 de Diciembre de 2012, para otros decían que experimentaríamos una transformación física o espiritual positiva que marcaría el comienzo de una nueva era. Bien aunque a día de hoy el mundo todavía sigue aquí y no parece que nosotros como individuos hayamos sufrido ningún tipo de cambio, puede que los mayas si nos dejaran un mensaje apocalíptico en su propio ocaso.

Los problemas empezaron en el año 660 (cuatro siglos antes del mismo) las prosperas ciudades mayas se habían multiplicado durante un periodo de lluvias abundantes,  pero hacía el año 440 comenzaron a sufrir las consecuencias de un descenso de las precipitaciones. Lo que allí sucedió fue el resultado de una combinación de factores estrechamente relacionados: las pautas de cultivo, la presión de una población creciente, el régimen hídrico, las estructuras de gobierno, las guerras permanentes, problemas climáticos, etcétera. Por ejemplo, el agua era muy importante para los mayas ya que una enorme fracción de la calorías consumidas por ellos provenía del maíz y su producción era la clave para la existencia y desarrollo de su civilización. Las formas de cultivo de los mayas fueron respondiendo, inevitablemente, a la presión demográfica. De manera que acortaron u omitieron los periodos de barbecho, entre otras medidas. La pérdida de cobertura vegetal generó procesos de erosión y deforestación que contribuyeron a intensificar las sequías… Para saber más pulse aquí.

Pienso que deberíamos aprender de los errores de los mayas y aunque hoy no se haya producido el fin del mundo, ni ningún tipo de transformación espiritual mística (al menos de forma evidente) creo que deberíamos de hacer un alto en nuestro camino como civilización y reflexionar sobre la situación tanto social como medioambiental en la que vivimos, y tal vez lleguemos a la conclusión que para solucionar todos los problemas de esta índole se requiere como mínimo un cambio radical en el paradigma idiosincrático que mueve a nuestra sociedad; en resumidas cuentas creo que es el momento de que realizemos de forma voluntaria y consciente esa transformación espiritual de la que nos hablaron los mayas.

¡¡Feliz 14º baktún!!