Basura Cero: El Experimento. Segunda Parte.

Publicado en: Vida Simple y Sustentable por Sofía López Olalde. Texto original

Foto: El Espectador

Esta ha sido una semana de investigación, de análisis, de aprendizaje pero sobretodo de reflexión, parece ser que se predica mucho más de lo que se hace y trazamos planes de universitario cuando apenas estamos en pañales. 

Como bien dije en el artículo anterior, parte de mis esfuerzos de esta semana se concentrarían en encontrar dónde disponer los residuos de forma separada; el resto del tiempo estaba comprometido con reducir lo no reciclable a como de lugar.

Montevideo ha sido una ciudad amable en ese sentido pues ofrece varias alternativas para enviar a reciclar lo que desechamos; tal vez ha algún habitante local le parezca una locura esto que acabo de escribir, pero créanlo; he estado en ciudades que puedes recorrer de cabo a rabo sin encontrar quien acopia reciclables. La primera alternativa es buscar los contenedores anaranjados pertenecientes a la Intendencia (gobierno local) y colocar ahí todo lo separado; la segunda alternativa es buscar los diferentes contenedores que la asociación civil CEMPRE (Compromiso EMpresarial Para el REciclaje) ha colocado por la ciudad y la tercera es acercarte a las cooperativas de reciclaje para entregarles en propia mano tus residuos.

Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas y al explorar algunas de las alternativas tuve mis tropiezos:


  1. Los contenedores anaranjados de la Intendencia expresamente colocados para depositar residuos reciclables sólo existen en algunos barrios aparentemente porque se trata de un proyecto piloto iniciado hace algún tiempo y del que no pude encontrar reporte alguno de su grado de avance. Parece ser que ya llevan un buen tiempo colocados así que ya tiene tintes más excluyentes que piloto. Bien, localicé un contenedor y allá voy con mi cargamento, ¡oh sorpresa! al abrirlo estaba lleno de basura de todo tipo; probé en uno más y encontré la misma situación así que desistí y me lleve de vuelta mi basurita.
  2. CEMPRE ha repartido contenedores para acopiar productos reciclables por toda la ciudad; son lindos depósitos rectangulares que sirven también como medio publicitario, el problema que encuentro es que sólo hay para plástico y que la gran mayoría están colocados en calles de tránsito intenso o bien de alta velocidad y justo en donde están y en un buen trecho hacia cada lado de ellos está prohibido estacionarse. Esto obliga a quien los use a acercarse caminando y por lo tanto llevar un cargamento más pequeño y acudir con más frecuencia a depositar residuos lo que no siempre es fácil para todos.
  3. Las bolsas de la leche se colocan fácilmente en contenedores en forma de cubo de leche de esos de acero que usan directamente en la ordeña; sin duda un diseño muy creativo. Estos contenedores están colocados afuera de algunos supermercados; el único inconveniente es precisamente ese, que están colocados sólo en los supermercados de una de las cadenas comerciales; así que, si no acostumbras acudir a esa tienda tendrás que ir sólo para depositar las bolsitas. Vale la pena mencionar que seguí la ruta de estas bolsitas y con gusto digo que sí son recicladas de manera conjunta por el fabricante y un par de cooperativas.
  4. La mejor alternativa sin duda la encontré en un supermercado dónde en la entrada, justo a un lado de las máquinas que reciben los envases de vidrio retornables, CEMPRE colocó contenedores para plástico, papel y cartón, vidrio y latas; está también el contenedor de las bolsitas de leche. Aquí en Uruguay te piden que el tetra brick lo coloques junto con los plásticos; no se si realmente se recicle como se debe; eso ya lo indagaré, pero por el momento he eliminado un contenedor en casa y ellos eliminaron uno en las calles. El único inconveniente de esta alternativa de disposición es que estos contenedores existen en un único supermercado en toda la ciudad.

No quiero adelantar conclusiones, ya llegarán a su tiempo; por el momento creo que a todos nos va quedando claro que no existe la infraestructura necesaria para hacer del reciclaje una tarea cotidiana que se adapte a la rutina de vida del ciudadano común sin causar estragos.


Esta semana estuve observando también mi famoso contenedor de los plásticos inútiles; revisé empaque por empaque para saber, en primera, cómo hacerle para que ya no lleguen a casa y después si son reciclables, reutilizables o nada más son re-inútiles. Respecto a cómo evitar que lleguen a casa les contaré la próxima semana pues aún estoy investigando las diferentes alternativas de compra de algunos productos. En lo que se refiere al reciclaje debo decir con tristeza que nueve de cada 10 bolsas de empaque (por ejemplo la del azúcar, el chocolate en polvo, el salvado, la granola) no dicen ni siquiera de qué están fabricadas, lo que convierte en algo sumamente complejo su reciclaje. Algunos fabricantes muy amablemente incluyen un dibujito como este:



Y yo me pregunto, ¿de verdad aún creen que con que sólo depositemos su bolsita en la basura ellos ya son muy responsables? A esto le llamo un mensaje retro; así como perdido en los años 70.


Para leer la primera parte de este experimento: http://simpleysustentable.blogspot.com/2012/05/basura-cero-el-experimento-primera.html

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